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ROMANCERO DE LA CUESTA DEL ZARZAL

4. GRAN RECOLECCIÓN DE ROMANCES EN LAS ISLAS CANARIAS, 1952-1957

 

 

4. GRAN RECOLECCIÓN DE ROMANCES EN LAS ISLAS CANARIAS, 1952-1957. VII. LA PUBLICACIÓN DE LOS FONDOS DEL ROMANCERO ENCOMENDADA AL SEMINARIO MENÉNDEZ PIDAL.

      Durante los primeros años de existencia del "Seminario Menéndez Pidal", el más importan­te enriquecimiento de los fondos del "Archivo del Romancero" consistió en la incorporación de un conjunto de colecciones canarias. A propósito de la riqueza y singularidad de esta rama de la tradición, Samuel G. Armistead comentaría años después70:

    "La historia de la recolección romancística en Canarias es, entre otras cosas, interesante por lo típico de sus etapas iniciales, pues en ellas se repite, en fecha más tardía, lo experimentado en Castilla en el siglo XIX. Hasta muy entrado el siglo XX, el romancero tradicional conti­nuó viviendo en Canarias en estado latente (...). En 1909 el Archivo Menéndez Pidal sólo contaba con cinco textos romancísticos canarios (...). En los años subsiguientes [a la publica­ción en 1927 de un folleto de Agustín Espinosa] fue desarrollándose con gran lentitud la ex­ploración del Romancero, hasta que por los años cincuenta se llevó a cabo una recolección masiva desde la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de La Laguna. La publicación del Romancerillo canario. Catálogo y manual de recolección (La Laguna, 1955), por M. Mora­les y M. J. López de Vergara71, reveló, por primera vez, la riqueza del Romancero insular, pre­vista por Menéndez Pidal. Hoy Canarias cuenta, finalmente, con una de las colecciones más nutridas y mejor editadas de las que existen para cualquier rama de Romancero".

Armistead hace aquí referencia a La flor de la marañuela. Romancero general de las Islas Canarias (1969)72, cuyos planes de publicación concediendo autonomía a las diversas colecciones acogi­das en ella hizo posible que los originales fueran cedidos por los colectores al "Archivo del Ro­mancero"73.

      Nada más incorporarme a mi cátedra lagunera, en Octubre de 1954, tuve noticia de la labor de recolección que venían realizando, con el apoyo del Cabildo de Tenerife, dos licenciadas tinerfeñas, María Jesús López de Vergara y Mercedes Morales, y traté de que profundizaran en el estudio del Romancero isleño, no sólo ampliando su colección, sino apreciando los textos reu­nidos confrontándolos con los procedentes de otras regiones74. La tradición oral canaria ya des­cubierta me parecía buena:

    "Ayer me reuní con 2 chicas que vienen recogiendo romances a cuenta del Cabildo insu­lar. Van a seguir ahora bajo mi dirección. Tienen algún romance bueno: El conde ajusticiado y el sobrino [= Grifos Lombardo], un fragmento raro para mí desconocido [- El idólatra de Ma­ría], Gaiferos, y otros interesantes: Conde Montalbán [= Conde Claros en hábito de fraile], Se­rrana de la Vera, Infantina + Caballero burlado + Bueso [= Hermana Cautiva], Conde Niño de tipo meridional, etc., y una colección bastante grande de los más corrientes. Una de las chi­cas está dispuesta a trabajar una tesis sobre «Caracterización del romancero canario», recogiendo más y comparando lo recogido con la tradición peninsular. Ya pediré ayuda" 75

Llegado el nuevo año, se les retiró el apoyo económico que venían recibiendo76; a pesar de ello, proyecté, con su colaboración, la publicación de un "Catálogo-manual de recolección del Ro­mancero canario" en la "Biblioteca Filológica" universitaria que estaba organizando77, y conti­nuaron la labor de encuesta, en la cual se produjeron hallazgos de nuevos temas de excepcional interés:

    "Abuelo, tenernos novedades románcísticas. La principal: una versión de «Tres hijuelos ha­bía el rey», con la cierva, etc. [= Lanzarote y el ciervo del pie blanco]. Creo que hasta ahora sólo teníamos una de Málaga!!" (20-I-1955).

    "Ha aparecido otro romance raro (por ahora es un fragmento largo). Parece un Conde Niño + Arnaldos (?), con largo «poder del canto» y sin transformaciones" (29-I-1955)".

A finales de Marzo estaba concluida la compilación del Romancerillo canario. Catálogo-Manual de recolección78. Pero antes de darlo a la imprenta hube de preparar mi estudio introductorio re­lativo a los romances más interesantes de la tradición canaria79. El 25 de Octubre de 1955 Ma­ría Jesús López de Vergara, en carta a Berkeley me comunicaba los detalles del envío de ejem­plares del Romancerillo, según yo había dejado dispuesto.

      La publicación del Romancerillo se concibió desde un principio como un paso hacia la ela­boración de un Romancero general de Canarias en que se publicaran todas las versiones que cu­piera reunir y recoger80. A finales de Abril, Mercedes Morales fue por un mes a trabajar al "Ar­chivo del Romancero" de Chamartín con el fin de elaborar su tesis doctoral sobre el Romancero isleño81 e ir preparando la publicación integral de la tradición canaria. En esa gran obra, junto a los textos previamente existentes en el "Archivo Menéndez Pidal / Goyri"82 y los publicados entre 1948 y 1952 por José Pérez Vidal, procedentes de la isla de La Palma83, se darían a cono­cer las dos espléndidas colecciones tinerfeñas de los años 50 reunidas por las autoras del Ro­mancerillo: una, geográficamente concentrada, pues el centenar de versiones de que acabaría por constar fue fruto de las encuestas realizadas por Mercedes Morales entre 1952 y 1955 en La Cruz Santa (Los Realejos o sus alrededores) e Icod el Alto84; otra, que cubre diversas comarcas de la isla y muy especialmente el entonces apartado Sur, fue reunida por María Jesús López de Vergara, quien prolongaría su actividad encuestadora desde 1952 a 195785. Diversas contribu­ciones menores procedentes de épocas distintas86 y de la tradición de diferentes islas del Archipiélago87 se irían integrando en el "Romancero general canario" lo cual contribuyó a su interés.

      La preparación de este "Romancero general canario" se inició en 1955-195788, año este últi­mo en que establecí contacto con los Cabildos insulares para su publicación89. El 6 y el 17 de Noviembre de 1959 propuse al Director del Secretariado de Publicaciones de la Universidad de La Laguna su inclusión en la "Biblioteca Filológica" que yo dirigía, especificando que podría en­trar en prensa en Marzo-Abril de 1960, pero no obtuve respuesta; al constatar que mis planes de continuidad de la colección filológica eran rechazados mediante la alegación de restricciones pre­supuestarias, solicité del Secretariado, Decanato y Rectorado que apoyaran, al menos, las publi­caciones proyectadas de especial interés isleño, mediante la recomendación de ellas al Cabildo In­sular de Tenerife, e hice ante este organismo gestiones directas para poder sacar a luz el Romancero general canario90. Hubieron de pasar, sin embargo, varios años antes de que las autoridades isle­ñas se interesaran mínimamente en la obra.

      Durante los años 1954-1960, de que vengo tratando, las aportaciones al "Archivo del Roman­cero" de corresponsales espontáneos continuaron llegando, pero de forma esporádica y estas co­laboraciones a distancia no tuvieron la importancia que en otras épocas.
 
     Desde principios de Junio de 1955 Menéndez Pidal (cuando menos) mantenía correspon­dencia con la "Jacob Michael Collection of Jewish Music" de New York, la cual había mostra­do interés por conocer la colección musical de Manuel Manrique de Lara existente en el "Ar­chivo del Romancero"; por su parte, Joseph Levisohn, desde esa "Collection" le remitió copia fotostática de algunas canciones y una "lista de los Romances ladino[s] de Idelsohn" (en carta el 17-VIII-1955, perdida, y, de nuevo, en otra carta de 29-XI-1955). Al parecer, Ramón Menén­dez Pidal se ofreció a hacerles copiar las músicas manriqueñas de su colección, al tiempo que les solicitaba el envío de uno de los romances de la lista recibida (26-XII-1955), ya que el 30 de Enero de 1956, Joseph Levisohn, desde la "Jacob Michael Collection" le anunció:

    "Con la presente le adjuntamos copia fotostática del romance «En la ciudad de Marsilia» [=Villancico glosado de La dama y el pastor] que usted menciona en su carta"91.

      El 8 de Agosto de 1955, desde Caracas, el profesor Benigno Oliveros escribió a Menéndez Pidal una carta adjuntándole una muestra de los romances de la colección que había venido reuniendo:

    "Insigne Maestro (...). El objeto de la presente es el de hacerle llegar unos romances y can­tas populares de Los Andes venezolanos (...). Allí se conservan aún tanto en las costumbres como en el lenguaje formas arcaicas, reminiscencias coloniales (...). Igualmente posee un acervo folklórico muy rico. Este hecho me indujo desde el año de 1945 a recoger romances, corridos, décimas, cantas, oraciones y cuentos populares (...). Mis fuentes directas de infor­mación han sido casi siempre viejos de extracción rural y por sobre los 60 años de edad. / Ahora tengo copilados y ordenados con sus respectivos comentarios 15 romances, 450 cantas y unos cuantos corridos, décimas, oraciones y cuentos, listos para entrar en la imprenta a fi­nes del presente mes. / Ud. es el maestro Hispanoamericano del romance y valoro cuánto apreciará los que le lleguen de América, por tal circunstancia le envío unos, como también al­gunas cantas".

La muestra enviada incluía dos interesantes versiones de ¿Cómo no cantáis, la bella? (é.a), otra de Las señas del marido (é) y otra de Albaniña (ó) encabezada con versos de Bernal Francés (í).

    Otras importantes noticias acerca del Romancero en América le transmitió desde Uruguay Lauro Ayesterán. En carta de 16 de Diciembre de 1957 le anunciaba:

    "Próximo ya a publicarse el Cancionero folklórico del Uruguay, que obra como segundo tomo de La música en el Uruguay cuyo primer volumen tuve el honor de enviarle hace un tiempo, quiero adelantar a Vd. el estado en que se encuentran los estudios sobre el Roman­cero Hispánico en el país (...). En la recolección del Cancionero infantil del Uruguay me han aparecido unas 80 variantes de unos 20 antiguos romances hispánicos que se conservan in­tactos en boca de los niños uruguayos./ Desde hace 15 años vengo recogiendo sistemática­mente el folklore musical de mi país mediante giras periódicas por todo el interior de la na­ción (...). En estos momentos tengo ya pautado y estudiado un 80% de la recolección y enteramente terminado el Cancionero infantil que abarca unas 300 grabaciones (...). El ro­mance no sólo vive en la memoria de las personas ancianas, sino que funciona todavía en el repertorio infantil. Mis cantores de romances tienen edades que oscilan entre los 4 y los 97 años (...)".

Y, al par que le informaba sobre sus hallazgos92, le ofrecía muy generosamente:

    "Y ahora viene el motivo especial de esta carta: ¿le interesaría poseer una selección de vie­jos romances hispánicos en el Uruguay. En caso afirmativo, sería para mí un placer —y un honor— hacer llegar a Vd., ya sea en disco o en cinta magnetofónica a través de la Embaja­da de España en el Uruguay (...), una selección de aquellos acompañada de las papeletas téc­nicas correspondientes".

      La oferta vino a hacerse efectiva pocos meses después. El 15 de Mayo de 1958, Ayestarán anunció a Menéndez Pidal:

    "En el curso del presente mes recibirá Vd. una cinta magnetofónica, acompañada de las plantillas correspondientes, con una selección de once romances hispánicos que viven en ple­na lozanía dentro del Uruguay (...). Trátase de once romances cantados, de los ochenta y tan­tos que circulan en mi país. He escogido las versiones más completas desde el punto de vista literario y las más afinadas y socializadas desde el punto de vista musical (...)",

pero, pese a haber hecho el envío "por valija diplomática"93, el 8 de Noviembre de 1958, Ayestarán se extrañaba de que Menéndez Pidal nada comentara respecto al envío de la cinta:

    "Como la grabación magnética no es —digamos— ecuménica, me ha asaltado la duda de que quizás no haya podido escucharla".

Sólo el 6 de Abril de 1959 Ramón Menéndez Pidal se disculpó de su silencio:

    "Su cinta magnetofónica estaba en casa de mi hijo Gonzalo. Ya la he recobrado (...). Mu­cho tiene que agradecer a V. el Romancero Hispánico su recolección (... etc., etc.)".

En su carta de Noviembre, Ayestarán daba noticia, no sólo del hallazgo de "variantes de Delgadina y Blanca Flor y Filomena realmente exquisitas", sino del encuentro con una sub-tradición romancística muy particular:

    "En estos últimos meses, además, he recogido en el norte del Uruguay, limítrofe con el Bra­sil, curiosos romances recientes y locales, en lengua portuguesa. Trátase de una frontera seca, donde la interacción uruguayo-brasileña es notable".

Todavía el 20 de Abril de 1960 Lauro Ayestarán comunicó a Menéndez Pidal una solitaria, pero curiosa, versión uruguaya, recogida el 21 de Marzo de 1960. Se trata de un Gerineldo + La condesita de indudable ascendencia asturiana.

      También de España hay que destacar la llegada al "Archivo Menéndez Pidal" desde la Dipu­tación Provincial de Asturias94 de las primeras grabaciones en cinta magnética de romances tra­dicionales peninsulares95:

    "Mi querido don Ramón:
    Recibirá por correo una cajita en la que van dos rollos de cintas magnetofónicas que con­tienen los romances de Somiedo (...). También recibirá Vd. un oficio de la Excma. Diputa­ción comunicándole el envío de estos romances" (carta del 12 de Junio de 1959).

No sabemos con qué propósito ni con qué criterios, alguien hizo un recuento general de tex­tos en el "Archivo del Romancero" el 21 de Noviembre de 1958, contabilizando 15.307.

Diego Catalán: "El archivo del Romancero, patrimonio de la humanidad. Historia documentada de un siglo de historia" (2001)

 

NOTAS

70 "La exploración del romancero. Coloquio", en El romancero en la tradición oral moderna (1973), pp. 127-150: pp. 144-145

71  En la "Biblioteca Filológica" que inicié al llegar como Catedrático a la Universidad de La Laguna. En un prólogo a este Romancerillo canario comenté los temas romancísticos más curiosos de la tradición ca­naria; posteriormente, amplié ese comentario en los caps. III, IV, V, VI y IX de Por campos del romancero.

72  La flor de la marañuela. Romancero general de las Islas Cananas, 2 vols., ed. D. Catalán con la co­laboración de M. J. López de Vergara, M. Morales, A. González, M. V. Izquierdo y A. Valenciano, Ma­drid: Seminario Menéndez Pidal y Cabildo Insular de Tenerife, 1969.

73 La mayoría de los originales de las 644 versiones de 132 temas tradicionales distintos, (sin incluir en el cómputo 38 versiones de 23 romances de pliego de cordel) que en 1969 se publicarían en los dos volúmenes de La flor de la marañuela se hallan hoy inte­grados en las carpetas del "Archivo".

74 Ya el Sábado 16 de Octubre informaba a Chamartín sobre el hecho: "2 chicas, a quien paga el Ca­bildo, vienen recogiendo romances y tienen ya una coleccioncita", y en mi carta pedía: "Otro encargo: que me copie Carmen Ugena las versiones que contenga la carpeta de Gaiferos para poder ilustrar a las recolectoras de romances de aquí". En otra carta del fin de mes dirigida a Chamartín, aclaraba: "Las chi­cas de los romances aún no se han «entrevistado» en serio conmigo. No sé si se animarán. Con lo de Gai­feros intentaba ponerles cebo, porque lo han recogido aquí. Abuela [explicaba a María Goyri], me basta co­pia de las versiones y mi cuadro".

75  Carta del 11 de Noviembre de 1954. El día 19, informaba de nuevo a mi familia de Chamartín: "He empezado a trabajar con las chicas romancísticas; pero aquí, sin bibliografía, ¿qué cabe hacer? Mejor dicho, la bibliografía es lo de menos, ante lo inédito de casa [= Archivo del Romancero]. A ver si me en­viáis copia de lo de Gaiferos y de las versiones del Conde preso o ajusticiado que no son del tipo ese de «Bernardo». Lo recogido es: Muerte del Príncipe don Juan, El Conde ajusticiado y el sobrino [= Grifos Lom­bardo], Gaiferos, [Conde] Claros en hábito de fraile, Alarcos, eso raro de «Saninés» [= El idólatra de Ma­ría], [La] Serrana [de la] Vera, [La] Infantina, [El] ca­ballero burlado + D. Bueso [= La hermana cautiva], C[onde] Niño, [La] cristiana [= hermana] cautiva; Sildana, [Las] señas [del] esposo [= marido], [La] mala hierba, Adúltera en ó [= Albaniña], Blancaflor y Filo [mena], La rueda de la Fortuna, Santa Elena, Rap­tor [pordiosero], En el camino del cielo (cosa no reli­giosa que no conozco), etc. Adjunto va lo de «Sani­nés», a ver si lo reconocéis".

76 "A las de los romances el Cabildo les ha negado este año la pequeña pensión de que disfrutaban" (13-I-1955), sospecho que por carambola de mis vanos intentos en la Universidad de que Mercedes Morales colaborara con retribución en el «Seminario de prác­ticas» de mi cátedra". Para entonces yo ya era un ca­tedrático cuya permanencia en La Laguna resultaba molesta para las autoridades universitarias de que de­pendía (Decano, Rector), pese a ser el único de los 4 catedráticos existentes en la Facultad de Filosofía y Letras que rechazaba regentar cargo alguno.

77 Aunque mi propósito era incluir el Catálogo-Ma­nual en la "Biblioteca Filológica", que se me había autorizado a crear en la Universidad, a comienzos de 1955 tenía ciertas reservas acerca de si acometer o no la empresa: "Otra cuestión es la «Biblioteca Filológi­ca». No quiero empezar contando sólo con la palabra rectoral, porque hoy se desdice de lo que dijo ayer en cualquier asunto. Parece que sí, pero (...) hay que an­dar con pies de plomo" (carta a mi familia del 20-I-1955).

78 En carta sin fecha próxima a la Pascua [sin duda del 30-III-1955] comunicaba a Ramón Menéndez Pidal: "Las dos romancistas de aquí han terminado ya el Romancerillo canario. Catálogo-Manual de reco­lección. Aparecerá con un prólogo mío en «Bibl[iote-ca] Filológica]» y así podremos utilizarlo en los pró­ximos  años  repartiéndolo profusamente entre los estudiantes, los maestros, etc. de todas las islas. Espe­ro, de esa forma, reunir material en abundancia".

79  Según se ve por carta del 11 de Mayo, en que pido datos para uno de los temas tratados: "Pregun­tadle a M[ercedes] Morales dónde tiene el cuadro mío sobre las versiones del  Conde Preso [= Grifos Lombardo]. Lo necesito con mucha urgencia". Los breves estudios realizados en el Prólogo acerca de los romances de Lanzarote y el ciervo del pie blanco, París y Elena, La romera de Santiago y Grifos Lombardo, El conde don Pero Vélez y El idólatra de María constitu­yeron la primera versión de los que luego incorpora­ría, reelaborados, a mi libro Por campos del romance­ro (1970), caps. III, IV, V, VI y IX.

80 Ya el 20 de Enero comentaba que las licenciadas dedicadas al Romancero "Están haciendo un Catálo­go-Manual de Recolección para que sirva de base a la gran recogida", y el 29, concretaba: "Estamos hacien­do, como punto de partida para la próxima recolec­ción, un Catálogo-Manual de Recolección del Roman­cero canario, en que figurarán todos los romances hasta ahora descubiertos (manejamos lo poco publi­cado y varias colecciones inéditas más o menos gran­des). Queríamos, para poder citarlas, una lista de las versiones canarias que hay ahí en la Colección [del «Archivo del Romancero»]. Por ahora, sólo una lista de romances y versiones con la indicación de la locali­dad en que fueron recogidos y el nombre del colector (y la fecha de recolección); ¿podríais hacérmela pronto? Basta con repasar rápidamente las carpetas, pues en­seguida identificaréis la letra de máquina de las que envió [Manuel] G[arcí]a Blanco, etc.". Esa lista aún no la había conseguido el 30 de Marzo: "No hicisteis lo que os pedí de sacar una lista de versiones de ro­mances que figuran en la colección. Va a enviarse el Catálogo a la imprenta y queríamos que abarcara la lista de lo que ahí tenemos".

81  El 26 la recomendé a Ramón y a Jimena Menén­dez Pidal diciendo: "Madre! Atiende todo lo que pue­das a Mercedes Morales en su trabajo romancístico. A ver si aprovecha de firme el mes que va a estar ahí. El Abuelo decía que debía ir a Madrid para poder enca­rrilar su tesis, ¡ya está ahí, a ver qué saca de ello!".

82  En la "Primera flor" del Romancero de Tenerife, que constituye el volumen I de La flor de la marañuela (1969), pp. 49-112, pueden verse impresas las "Versiones coleccionadas por R. Menéndez Pidal con la colaboración de M. García Blanco y M. R. Alon­so"; fueron "Recogidas por J. Bethencourt, A. Espi­nosa, L. de la Rosa, R. de la Rosa, E García Fajardo, J. Peraza de Ayala y otros". A ellas hay que sumar en el vol. II de La flor de la marañuela las versiones 492, 494, 496, 497, 499, 502, 504, 506, 507, 508, 510, 511 (de La Gomera) y 517, 520, 524 (de El Hierro).

83 La mayoría habían aparecido paulatinamente en la RDyTP, IV (1948), 518-569 y 197-241; V (1949), 435-470; VI (1950), 554-575; VII (1951), 266-291 y 424-445; otros en Revista de Historia, XC-XCI (1950) y DL, IX (1952).

84  Pueden verse impresas en la "Tercera flor" del Romancero de Tenerife, pp. 230-322, que está exclusi­vamente formada por las versiones coleccionadas por Mercedes Morales.

85  Pueden consultarse en la "Segunda flor" del Ro­mancero de Tenerife, pp. 113-229, la cual está consti­tuida por las versiones coleccionadas por María Jesús López de Vergara. María Jesús continuó la tarea recolectora durante mi estancia en Berkeley, California, en los cursos 1955-56 y 1956-57. Cuando G. Bronzini envió su reseña, publicada en Lares, del Romancerillo y M. J. López de Vergara la remitió a Chamartín, Ra­món Menéndez Pidal me la reexpidió a Berkeley con una nota en el dorso en que  me informaba: "Viene con carta de M[arí]a Jesús R. de Guevara (sic) (...) que encontró un filón de Romances en la zona norte y que se desplazará para recogerlos (...)".

86  En la "Cuarta flor" del Romancero de Tenerife, pp. 323-366, van agrupadas las "Versiones coleccio­nadas por L. Diego Cuscoy, L. González de Ossuna, S. Sosa, L. Pérez y M. V. Izquierdo".

87  Recogidas por Juan Régulo Pérez en Garafía y Mazo, La Palma; Isabel Ascanio en Agulo, La Gome­ra; Francisco Tarajano en Agüimes, Gran Canaria, y Sebastián Sosa en Agaete y La Lechuguilla, Gran Ca­naria.

88  La edición "fue proyectada en 1955 por la «Bi­blioteca Filológica» de la Universidad de La Laguna. Durante los años 1955-1957 colaboraron activamen­te en el proyecto María Jesús López de Vergara y Mercedes Morales; a ellas no sólo se deben las dos co­lecciones de romances más ricas incluidas en esta Flor de la Marañuela, sino también la primera organiza­ción de los varios materiales", según se explica en el prólogo de la obra.

89  El 6-VII-1957 Ramón Menéndez Pidal me es­cribió, comentando sin duda noticias que yo le había transmitido: "Que los cabildos te ayuden al Roman­cero, gran empresa!".

90 Según carta del 30-IV-1960 a Juan Ravina, Pre­sidente del Excmo. Cabildo Insular [de Tenerife]: "En el pasado mes de Enero, como director de la «Bi­blioteca Filológica» de la Universidad de La Laguna, presenté al Secretariado de Publicaciones de la Universidad un proyecto de ediciones para 1960 en que se incluían dos obras de interés no sólo general sino también local:  1. Romancero General Canario (...). Ante las escasas disponibilidades actuales de la Uni­versidad para la edición de obras científicas (...), con­sultado el Rector, consideró pertinente que me diri­giese en forma personal a Vd. (...)".

91  La versión enviada es la III.35 del RTLH, X (1977-1978), pp. 166-167.

92 Los romances infantiles pertenecen al reperto­rio más común de las ciudades de España y América: "8 + 8 sílabas: «En Galicia hay una niña», Andelito de oro, Mambrú, La monjita, «Estaba el señor don Gato», «¿Dónde vas, Alfonso XII?», Delgadina, La morenita (Don Bueso), La muerte de Elena y «Es­tando Catalinita»; (...) 6 + 7 sílabas: «Me casó mi madre» (...)".

93 Por intermedio del Agregado Cultural de la Em­bajada Española en Montevideo Rafael Ferrer Sagreras.

94 El firmante de la carta es José Fernández Buelta.

95  Los romances habían sido recogidos por José Manuel Feito, capellán en el Colegio de los Cabos en Pravia, y en forma impresa enviados anteriormente a Ramón Menéndez Pidal, quien escribió directamen­te al capellán dándole algunos consejos. Feito se ha­bía apresurado a agradecer esa deferencia y a explicar que el "retocado" de algunos versos, contra el que don Ramón le había predicado, no había consistido en "rellenar lagunas", sino en substituir "alguna pala­bra por otra (...) cuando el recitador se mostraba in­seguro". Menéndez Pidal le animó después a conti­nuar sus pesquisas: "A ver si encuentra V. la recitadora o, mejor, el recitador que sepa muchos ro­mances, pues ese suele saber los raros y más precio­sos. Los recitadores que saben sólo cuatro o cinco, suelen saber sólo los más corrientes."

LÁMINAS

    El Romancerillo canario (1955) tuvo el triple objetivo de animar la labor colectora de romances en las Islas Canarias aireando la labor de unas jóvenes licenciadas, de organizar los materiales exis­tentes y de mostrar la importancia de una sub-tradición del Romancero pan-hispánico olvidada.
    Portada del Romancerillo, seguida de las solapas y de dos páginas de la Introducción y del Manual de Reco­lección.

   

    Canta de Uruguay  y trascripción musical de Lauro Ayestarán.

Más información:

   espectador.com: Archivo de Lauro Ayestarán: un patrimonio en peligro

SUMARIO:

I
PRESENTACIÓN: EL ROMANCERO Y EL ARCHIVO MENÉNDEZ PIDAL

* EL ARCHIVO DEL ROMANCERO, PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD

II. CREACIÓN Y ORÍGENES DEL ARCHIVO MENÉNDEZ PIDAL DEL ROMANCERO

*1. LOS FONDOS DEL S. XIX

* 2. DESCUBRIMIENTO DE LA TRADICIÓN ORAL CASTELLANA EN 1900

* 3. LOS PRIMEROS PASOS EN LA COMPILACIÓN DE UN ROMANCERO ORAL PAN-HISPÁNICO

* 4. EN BUSCA DE ROMANCES FUERA DE LA PENÍNSULA: EN CANARIAS Y EN LAS COMUNIDADES SEFARDÍES, 1904

* 5. "A POR PAN Y A VER AL DUQUE": PRIMER VIAJE A AMÉRICA, 1905-1906

* 6. EL FONÓGRAFO DE CILINDROS DE CERA VIAJA EN BUSCA DE MELODÍAS, 1905-1906

* 7. LA MÚSICA Y LA DANZA COMO PARTE DEL ROMANCERO, 1905

* 8. ANTE UNA BUENA COSECHA, 1905-1908

* 9. MENÉNDEZ PIDAL HACE INVENTARIO: LAS PRIMERAS MIL QUINIENTAS VERSIONES DEL ARCHIVO Y LAS CONFERENCIAS EN LA COLUMBIA UNIVERSITY DE NUEVA YORK EN 1909

* III EL ROMANCERO HISPÁNICO BAJO LOS AUSPICIOS DE LA JUNTA PARA AMPLIACIÓN DE ESTUDIOS

* 1. LA CREACIÓN DEL CENTRO DE ESTUDIOS HISTÓRICOS Y EL ROMANCERO DE RAMÓN MENÉNDEZ PIDAL

* 2. LOS DIALECTÓLOGOS Y EL ROMANCERO ORAL: 1910-1912

* 3. MANRIQUE DE LARA COLECTA EN ORIENTE EL ROMANCERO SEFARDÍ, 1911-1912

* 4. OTRAS APORTACIONES AL ARCHIVO ANTERIORES A LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL, 1909-1913

* 5. EL ROMANCERO HISPÁNICO DE AMÉRICA DEL NORTE, 1913

* 6. LOS PLIEGOS SUELTOS DE PRAGA LLEGAN AL ARCHIVO, 1913-1914

* 7. MENÉNDEZ PIDAL VUELVE A AMÉRICA, PERO DEJA DE LADO EL ROMANCERO, 1914

* 8. LAS GRANDES ENCUESTAS REGIONALES DE JOSEFINA SELA Y DE EDUARDO M. TORNER, 1914-1920

* 9. MANRIQUE DE LARA, EL ROMANCERO DE LOS JUDÍOS DE MARRUECOS Y DE LA PENÍNSULA Y LA MÚSICA DE LOS VIHUELISTAS, 1915-1922

* 10. POESÍA POPULAR Y ROMANCERO, 1914-1918

* 11. LA GEOGRAFÍA FOLKLÓRICA Y LA EXPLORACIÓN DE REGIONES HASTA EL MOMENTO POCO ENCUESTADAS, 1920

* 12. AURELIO DE LLANO Y EL CONOCIMIENTO DEL ROMANCERO ASTURIANO, 1919-1925

* 13. OTRAS APORTACIONES AL ARCHIVO DE COMIENZOS DE LOS AÑOS 20

* 14. LA TERCERA PARTE DE LA SILVA, PERDIDA, 1921

* 15. EL ARCHIVO DEL ROMANCERO, EN EL OLIVAR DE CHAMARTÍN DE LA ROSA, 1925

* 16. SIGUE LA ACTIVIDAD RECOLECTORA, 1926-1927

* 17. LA CEGUERA TEMPORAL DE MENÉNDEZ PlDAL Y SU "FLOR NUEVA DE ROMANCES VIEJOS", 1926-1928

* 18. MANRIQUE DE LARA NUEVAMENTE EN ORIENTE. EDICIÓN FRUSTRADA DE LAS MÚSICAS DEL ROMANCERO: 1923-1928

* IV. EL PROYECTO DE PUBLICACIÓN DE EPOPEYA Y ROMANCERO FINES DE LOS AÑOS 20, COMIENZOS DE LOS AÑOS 30

* 1. EL ROMANCERO, PARTE DE UNA MAGNA OBRA A PUNTO DE PUBLICARSE

* 2. LAS FUENTES DOCUMENTALES ANTIGUAS

* 3. GALICIA EN EL FOCO DE LAS INVESTIGACIONES SOBRE EL ROMANCERO PAN-HISPÁNICO, 1928-1931

* 4. APORTACIONES AL ARCHIVO DE COLECCIONES AJENAS. EL ROMANCERO CATALÁN, 1930-1933

* 5. 1930. LOS BAILES ROMANCEADOS QUE AÚN PERDURAN

* 6. NUEVAS CAMPAÑAS DE RECOLECCIÓN DE MÚSICAS Y TEXTOS POR LA SECCIÓN DE FOLKLORE DEL CENTRÓ DE ESTUDIOS HISTÓRICOS, 1930-1936

* 7. PARÁLISIS RECOLECTORA EN PORTUGAL, 1930

* 8. DISCOGRAFÍA Y PELÍCULAS ETNOGRÁFICAS; EL ROMANCERO INCORPORADO A LA ENSEÑANZA ESCOLAR. 1932-1936

* V. LA GUERRA CIVIL. EL ROMANCERO, PARTE DEL TESORO NACIONAL

* 1. DISCONTINUIDAD DE EPOPEYA Y ROMANCERO Y CONTINUIDAD LATENTE DEL ROMANCERO

* 2. MADRID BOMBARDEADO. EL ARCHIVO "REFUGIADO" EN LA EMBAJADA DE MÉXICO

* 3. OCASO DE LA JUNTA PARA AMPLIACIÓN DE ESTUDIOS. CONTINUIDAD Y DISCONTINUIDAD DE LOS PROYECTOS DEL CENTRO DE ESTUDIOS HISTÓRICOS

* 4. ANÍBAL OTERO, ENCUESTADOR DEL ROMANCERO Y DEL ATLAS LINGÜÍSTICO, ACUSADO DE ESPIONAJE

* 5. MENÉNDEZ PIDAL, ANCLADO EN CUBA, A LA BÚSQUEDA DE ROMANCES

* 6. VERANO DE 1937. LOS DISCÍPULOS DE MENÉNDEZ PIDAL Y LAS CANCILLERÍAS SE PREOCUPAN DE LA SEGURIDAD DEL ARCHIVO DEL ROMANCERO

* 7. EL ROMANCERO Y LA HISTORIA DE LA LENGUA DE MENÉNDEZ PIDAL VIAJAN COMO PARTE DEL TESORO CULTURAL DE ESPAÑA

* VI. EL ARCHIVO DEL ROMANCERO Y RAMÓN MENÉNDEZ PIDAL CONFINADOS EN SU CASA

* 1. DEPURACIÓN DE MENÉNDEZ PIDAL. FIN DE SUS PROYECTOS CON UNA PROYECCIÓN NACIONAL, 1939-1941

* 2. EL ROMANCERO DORMITA EN SUS CAJONES, 1939-1945

* 3. UNA NUEVA GENERACIÓN DE ROMANCISTAS TOMA EL RELEVO, 1945-1946

* 4. MENÉNDEZ PIDAL VUELVE AL ROMANCERO, 1946-1950

* 5. LA CARTOGRAFÍA ROMANCÍSTICA Y LA EXPLORACIÓN DE LA TRADICIÓN EN LA SERRANÍA DE CUENCA, EN LAS BALEARES, EN SORIA, EN SEGOVIA, EN ÁVILA, EN LA MESETA MANCHEGA, EN ALISTE Y EN MARRUECOS, 1947-1948

* 6. ÉXITO EN LA TRADICIÓN ORAL DE ALGUNAS VERSIONES FACTICIAS DE LA FLOR NUEVA

* 7. HACIA UNA RECUPERACIÓN DEL ROMANCERO PORTUGUÉS, 1948

* 8. NUEVAS ENCUESTAS: LIÉBANA Y POLACIONES; LA SIERRA DE BÉJAR Y PLASENCIA; SANABRIA. LLEGAN OTRAS APORTACIONES AL ARCHIVO. 1948-1949

* 9. FIN DEL SEMINARIO DE ESTUDIOS HISTÓRICOS. FINAL DE LAS ENCUESTAS Y PUBLICACIÓN DIFERIDA DE LOS TRABAJOS SOBRE EL ROMANCERO, 1950-1954

* 10. ACTIVIDAD RECOLECTORA EN LA AMÉRICA HISPANA. SU REPERCUSIÓN EN EL "ARCHIVO MENÉNDEZ PIDAL", 1948-1952

* 11. REPERCUSIONES DE LAS PUBLICACIONES SOBRE EL ROMANCERO EN LA EXPLORACIÓN DE LA TRADICIÓN ORAL, 1953-1954

* 12. HACIA UNA EDICIÓN INTEGRAL DE LAS FUENTES IMPRESAS DEL ROMANCERO DEL S. XVI

* VII. LA PUBLICACIÓN DE LOS FONDOS DEL ARCHIVO DEL ROMANCERO ENCOMENDADA AL SEMINARIO  RAMÓN MENÉNDEZ PIDAL

* 1. EL "SEMINARIO MENÉNDEZ PIDAL" DE LA UNIVERSIDAD DE MADRID Y EL ARCHIVO MENÉNDEZ PIDAL, 1954

* 2. LOS PRIMEROS DIFÍCILES AÑOS DEL "SEMINARIO MENÉNDEZ PIDAL" Y EL ROMANCERO, 1954-1959

* 3. INTENTOS DE ROMPER CON EL AISLAMIENTO INTELECTUAL DE LA ESPAÑA DE LOS AÑOS 50

* 4. GRAN RECOLECCIÓN DE ROMANCES EN LAS ISLAS CANARIAS, 1952-1957

* 5. EL ROMANCERO TRADICIONAL, CUESTIONADO, 1959-1962

* 6. ÚLTIMAS CONTRIBUCIONES DE MENÉNDEZ PlDAL AL ROMANCERO, 1959-1965

* 7. MENÉNDEZ PIDAL EN ISRAEL Y EL ROMANCERO SEFARDÍ, 1964

* 8. EL SEMINARIO MENÉNDEZ PIDAL Y EL FUTURO DEL ARCHIVO-BIBLIOTECA MENÉNDEZ PIDAL, 1963-1966

* 9. REACTIVACIÓN DE LA LABOR EDITORIAL DEL ROMANCERO, 1966

* 10. PROPUESTA DE CREACIÓN CON CAPITAL AMERICANO DE UN CENTRO DE ESTUDIOS HISTÓRICOS EN EL ARCHIVO-BIBLIOTECA MENÉNDEZ PIDAL, 1967-1968

* VIII EL ARCHIVO DEL ROMANCERO RENACE COMO PATRIMONIO CULTURAL DE INTERÉS MUNDIAL

* 1. NON OMNIS MORIAR, 1969

* 2. BELLAS PALABRAS Y NEGRAS REALIDADES, 1969-1970

* 3. ACTIVIDADES DE LA CÁTEDRA-SEMINARIO MENÉNDEZ PIDAL. CATALOGACIÓN DE LOS FONDOS SEFARDÍES DEL ARCHIVO DEL ROMANCERO. LOS FONDOS PATXOT SE HACEN INACCESIBLES. 1969-1971

* 4. EL ARCHIVO DEL ROMANCERO Y LA CONEXIÓN AMERICANA, NUEVAS PERSPECTIVAS, 1971-1975

* 5. EL ROMANCERO ¿AÚN VIVE?, 1973-1975

* 6. CRECER, PARA NO MORIR, 1976-1981

* 7. EL ROMANCERO AÚN VIVE. VOCES NUEVAS DE LA TRADICIÓN ORAL, 1977-1978

* 8. DESCRIPCIÓN Y ANÁLISIS DEL ROMANCERO. UNA NUEVA EMPRESA COLECTIVA, 1977-1984

* 9. LAS GRANDES ENCUESTAS COLECTIVAS DEL PROYECTO DEAPHR, 1980-1984

* 10. LAS TRADICIONES ORALES LEONESAS Y EL ROMANCERO EN LEÓN A FINALES DEL S. XX, 1984-1988

* 11. FIN DE ETAPA. DISPERSIÓN DEL EQUIPO INVESTIGADOR DEL PROYECTO DEAPHR. LA FUNDACIÓN RAMÓN MENÉNDEZ PIDAL Y EL CAPITAL PRIVADO INAUGURAN UNA ÉPOCA NUEVA. 1984-1989

* 12. LOS ARCHIVOS DEL ROMANCERO NUEVAMENTE EN EL FOCO. LOS LABORATORIOS HUMANÍSTICOS INSTALADOS EN EL CENTRO DE ESTUDIOS HISTÓRICOS MENÉNDEZ PIDAL, 1988-1998

* 13. EL ROMANCERO ANTE EL CENTENARIO DEL ’98

* EPÍLOGO

* 1.- EL CENTRO DE ESTUDIOS HISTÓRICOS MENÉNDEZ PIDAL DINAMITADO

* 2.- EL ARCHIVO DEL ROMANCERO ANTE LA REESTRUCTURACIÓN DE LA FUNDACIÓN MENÉNDEZ PIDAL Y DEL CENTRO SITO EN CHAMARTÍN

* 3.- LOS FONDOS DEL ARCHIVO DEL ROMANCERO Y LA INVESTIGACIÓN

* 4.- DESPEDIDA

Diseño gráfico:

La Garduña Ilustrada

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