6. EL FONÓGRAFO DE CILINDROS DE CERA VIAJA EN BUSCA DE MELODÍAS, 1905-1906.
6. EL FONÓGRAFO DE CILINDROS DE CERA VIAJA EN BUSCA DE MELODÍAS, 1905-1906. II. CREACIÓN Y ORÍGENES DEL ARCHIVO MENÉNDEZ PIDAL DEL ROMANCERO
Durante los meses de estancia en América de Ramón Menéndez Pidal, su Archivo siguió enriqueciéndose.
Por lo pronto, su hermano Juan, al tiempo que le escribía (1-II-1905) informándole de la caída del poder del gobierno de Maura y las subsiguientes crisis, le hacía saber
"En este número de la Revista de Archivos publicaré unas Endechas judías de cierto amigo tuyo de Lisboa a quien enviaré mañana las pruebas177. / Tengo tres preciosos romances recogidos en Miraflores de la Sierra que te daré para tu colección178. No dudo que cuando vuelvas traerás de ahí una cosecha muy regular";
por otra parte, a través de las cartas que le dirigía su mujer nos enteramos de cómo ya por entonces Ramón Menéndez Pidal contaba para la exploración del Romancero oral con un colaborador que habría de suplir la falta de información musical de los creadores del Archivo: el músico Manuel Manrique de Lara, capitán de la Armada, con quien había trabado relación en la tertulia de los domingos en casa de Menéndez Pelayo en la Academia de la Historia179. Manrique había ya aceptado la tarea de transcribir las melodías grabadas en los cilindros de cera del fonógrafo y Menéndez Pidal había decidido que el fonógrafo viajara, durante su ausencia, a Extremadura. En efecto, el 24 de Diciembre de 1904, María Goyri escribía a su marido:
"A estas horas (10 Vi) ya estarás en alta mar y acaso mareado (...). Ya me han traído la caja del fonógrafo y ha quedado muy bien con su tapa con una pestaña por tres lados que ajusta muy bien. También tengo el grabador. Ahora sólo falta que García Plata mande a buscarlo";
y el 30 de Diciembre:
"Ahora llega una carta de García Plata diciendo que no ha podido enviar por el fonógrafo y que si te atreves a enviarlo facturado. Veré si lo puedo enviar el lunes 2 (...). Ofrece enviar otros romances y pone por las nubes a Manrique de Lara".
Diligentemente, el día 3 de enero de 1905 hizo María el embalaje, facturó la carta y escribió a García Plata180. Cuando llegó el aparato a Alcuéscar, causó gran conmoción (según carta de María Goyri del 8 de enero resumiendo otra de García Plata):
"Le envié un cilindro impresionado y dice que en cuanto recibieron el fonógrafo lo puso y que su señora se reía mucho y sus chicos fueron corriendo a llamar a los abuelos para que oyeran la «máquina cantadora». En fin que está loco con el fonógrafo. Veremos lo que resulta. Me he gastado en caja, envío y cilindros 17 pts".
Para fines de mes, ya la "máquina cantadora" había hecho su trabajo. El 1 de Febrero, María Goyri contaba:
"Esta mañana vino el médico de Alcuéscar con una carta de García Plata pidiéndome otros cuatro cilindros (...). Se conoce que García Plata va a recoger tantas tonadas como letras. Veremos lo que dice luego Manrique de Lara. Le he enviado seis cilindros para que no quede por peseta más o menos y porque eso hubieras hecho tú. Según me ha dicho el médico no hacen García Plata y su mujer más que aprender tonadas para impresionar cilindros".
Sin duda, antes de transcribir las melodías recogidas en el fonógrafo por García Plata, Manrique de Lara había transcrito las impresionadas por el matrimonio Menéndez Pidal / Goyri en el Valle del Lozoya181. Es, pues, seguro que Menéndez Pidal disponía de un fonógrafo para cilindros de cera años antes de que el 17-V-1906 adquiriera otro en "La fonográfica madrileña", cuyo recibo ha reproducido G. Menéndez Pidal en El pequeño mundo que me tocó vivir.
También durante la ausencia de Ramón Menéndez Pidal en América llegaron romances extremeños por otros conductos:
"Espero el 2° correo y trae una carta de Dª Gregoria, pero no la tuya. Espero que mañana llegará. Hoy has debido de embarcar en Panamá (...). Dª Gregoria envía 4 romances: el de D. Pedro, el de los ladrones y los arrieros, el de Blancaflor y Filomena y el de los forzadores. Además las coplas: «El día que tu te cases - aquel día yo me muero». Son versiones malas, pero muy originales. La escribiré mañana que estaré de mejor humor" (12-1-1905).
Y el 24-1-1905 María Goyri acusaba recibo de otra "carta de Da Gregoria Canelo muy amable, ofreciéndome seguir buscando romances. De esta vez voy a quedar de secretario tuyo".
Como Gregoria Canelo explicaba por entonces a Menéndez Pidal, los romances y coplas que indistintamente le enviaba pertenecían a la tradición de su propia casa:
"los sabemos mi criada y yo por aber sido siempre curiosas y recordar con frecuencia lo que sabemos de nuestra niñez (...), D. Ramón, si la desgracia no me ubiera cojido tan de lleno, no necesitaría V. fonógrafo, ni músico que biniera a recojer las tonadas (...); pero, por desgracia, mi boz se a istinguido tal vez para siempre" (Malpartida de Plasencia, sin fecha, c. 1905-1906).
Pero también inquirió en su entorno, de modo que el repertorio de Malpartida que, a través de envíos escalonados entre 1903 y 1906, hizo llegar doña Gregoria al Archivo acabaría por constar de unos 28 temas distintos182.
Algunos meses más tarde, llegaban a manos de María Goyri los resultados de otro de los envíos a Extremadura de cuestionarios:
"Ayer vino Izquierdo, el de Plasencia, a traer romances y palabras183. Los romances son los de siempre: Carmela, Adúltera y Delgadina. Le indiqué la necesidad de recoger con exactitud y le hice las observaciones sacramentales de todo colector" (31-III-1905).
Dámaso Ledesma, desde Salamanca, aparte de hacer saber que su cancionero musical había sido admitido a concurso,
"te ofrece una rica colección de romances y dice que con los de Maldonado ha aprendido a distinguir los viejos de los nuevos",
según escribía María Goyri (9-1-1905) a Ramón Menéndez Pidal; y, en efecto, el 11 de Agosto le remitiría "unos romances para que me diga si esto es lo que desea. Tengo de otra clase, que no le mando hasta ver qué me dice Vd.". El envío incluía seis romances tradicionales (y uno culto), en su mayoría procedentes de Dehesa de Incala.
Aunque el propio viajero por tierras del Pacífico escribió a José Benoliel desde Quito (25-1-1905) y desde Lima (3-IV-1905), su corresponsal lisboeta no le contestó sino a Madrid, cuando creía que ya habría llegado (1 l-V-1905). En su carta le explicaba que había diferido el contestar incluso a otra carta de Menéndez Pidal previa a su partida para América y le aclaraba:
"No envié los romances, esperando recibir de mis corresponsales marroquines algo nuevo e importante para mandárselo todo junto a su llegada a España. Infelizmente no fue la cosecha tan abundante como yo la deseaba, y no habrá más remedio sino volver personalmente a Tánger e ir mesmo pasar algunos días en Tetuán durante las próximas ferias, como espero hacerlo, a fin de esjugar todo lo más que posible fuese. Entre tanto allá le envío hoy un mazo de papeles donde encontrará algunos romances nuevos, muchos fragmentos y nuevas versiones de otros ya enviados (...)184. El mazo que hoy mando tiene 56 páginas manuscritas".
Cuando María Goyri supo que su marido llegaba por fin a Lisboa, junto a "un abrazo de llegada al desembarcar", le enviaba (28-V-1905) la advertencia:
"Si ves a Benoliel, te aviso que hace unos días envió nueva remesa de romances, algunos muy buenos. En estos días soy incapaz de pensar en nada más que en tu llegada".
Benoliel cumplió su propósito de intentar recoger nuevos romances visitando las comunidades marroquíes; Menéndez Pidal le había ofrecido su fonógrafo para recoger, junto a los textos, las melodías. Pero el viaje fue, desde el punto de vista del romancero, bastante menos interesante que lo esperado. El 23 de Octubre de 1905, Benoliel comentaba con Menéndez Pidal
"Sentí de veras que el fonógrafo no me haya llegado a las manos mientras podía aprovecharlo en beneficio de nuestra colección de romances. Ojalá encuentre nueva ocasión de realizar nuestro empeño. No sé todavía si podré ir el próximo año a Tánger; pero entretanto, aquí mismo algunas tonadas se podrían recoger, si tuviera un fonógrafo en mi poder.
No he conseguido reunir sino muy pocos romances, pues en Tánger pocas mujeres saben siquiera los que yo poseo, y para encontrar otros habría de ir a Tetuán, lo que no me fue posible por causa de los Raisutis y otros bandidos que están señores de los caminos".
Tras aquel viaje, Benoliel pensaba que, para ampliar el repertorio por él reunido, sería preciso visitar otras comunidades sefardíes. Así se lo expresaba en otra carta (29-X-1905) a Menéndez Pidal:
"Lo que creo firmemente es que el país (Tánger, Tetuán, Arcila, Alcázar y Larache) contiene aún una fuente riquísima de romances y poesías españolas muy digna de ser explotada. No pierdo la esperanza de hacer un día importantes hallazgos en este orden de asuntos".
A finales de Noviembre o en Diciembre de 1906185 Benoliel trataba de concretar con Menéndez Pidal un proyecto que podría haber venido a complementar, de forma sustancial, su anterior labor de descubridor de la tradición de Tánger:
"Vamos ahora al proyecto del que le hablé. Es convicción mía que algunas ciudades de Marruecos, Tetuán, Tánger, Xexuan, Alcázar, Arcila, Larache, Casa Blanca y quizá algunas más del litoral, representan para el estudio de la poesía medio-eval española y particularmente para el romance, una mina inestimable, que hay que explorar cuanto antes y con el mayor cuidado, si no se quiere perder sin remedio aquel tesoro tan milagrosamente conservado hasta hoy pero fatalmente destinado a sumirse dentro de poco tiempo. Las hodiernas generaciones menosprecian y sacrifican a las invenciones de moda aquellos que denominan cantares de viejas y que estas mismas ya no se atreven a cantar con recelo de atraerse las mofas y motejos de sus hijas",
ofreciéndose a ir en los tres meses de vacaciones (Julio, Agosto y Setiembre) de cada año a esas ciudades "con una subvención concedida por el Gobierno o la academia de España" y le ponderaba:
"Por el número de romances recogido de poco más de una docena de recitadoras, puede Vd. hacer una idea de lo que se podrá alcanzar yendo directamente a las mejores fuentes".
Sin duda, en caso de haber cuajado, el proyecto de Benoliel habría "eclipsado", según él predecía, todo cuanto hasta el presente se había hecho en el ámbito del enriquecimiento del romancero; pero, en cambio, se equivocaba Benoliel al creer que, entre las condiciones "indispensables" para realizar el trabajo, se hallaban las de "ser judío y más o menos acreditado y conocido entre sus correligionarios", hipótesis ésta que Manuel Manrique de Lara vendría, años después, a desmentir.
Aunque los últimos envíos de Benoliel no tuvieron la importancia de los anteriores, la suma de todo lo por él remitido al Archivo Menéndez Pidal entre 1904 y 1906 pude decirse que constituye un romancero judeo-español de Tánger temáticamente casi completo. Su colección tangerina constituyó una aportación hasta entonces no superada por ninguna otra procedente de la tradición oral moderna, y aun hoy sigue teniendo un valor excepcional. Algunos de los romances coleccionados por Benoliel no han vuelto a ser hallados posteriormente186.
Lo que, en cambio, nunca llegaría a producirse con su ayuda fue la proyectada grabación en discos de cera de las melodías. El 7 de Mayo de 1906 Benoliel escribía a Menéndez Pidal:
"A propósito del fonógrafo. No sé si ya he dado a Vd. la noticia de que me he vuelto a casar en fines de Setiembre pasado, con una primita mía [muy joven, aun no tiene 20 años completos187] —quien, si Dios quiere, me ha de hacer padre dentro de dos meses. Pues con ella contaba para impresionar unos 15 cilindros, siendo que tiene una vocecilla dulce y afinada; pero su estado actual no la permite cantar y en Lisboa no veo quien esté en condiciones de dar una idea correcta y completa de aquellas suaves melodías. Si no hay prisa, creo que será mejor dejar este trabajo para más adelante"
y en la carta de fines de Noviembre o Diciembre insistía:
"El fonógrafo por ahora poco podré aprovecharlo porque mi pobre mujer sigue sufriendo de la garganta".
Respecto a la tradición de los judíos de Oriente, Menéndez Pidal continuaba haciendo gestiones a través de corresponsales en Viena. El 22 de Abril de 1906 Dan S. Albachary, aparte de recomendarle entrar en relación directa con "Abram Danon, ahora Rector del Seminario Israelítico en Constantinopel", le ofrecía
"Si tendré occasión encontrarme con algún illustre cantador de Bosna que passan algunas vezez por Vienna, no mancaré accordarme de Vd en preguntando por las requiridas romances que de cabeza no las sé, mas cuando las siento cantar, me recuerdo de ellas".
Y, en efecto, cumpliendo esta promesa, en Mayo de 1906, Dan S. Abachary, desde Viena, remitió a Menéndez Pidal dos romances de un informante de Bosnia, el cual
"decía que allí las mozas, cuando friegan el frigado, y las vavas, cunando a sus netos, vzan a cantar estas cantigas".
Uno de los dos romances era el raro romance de La cabalgada de Peranzules ("Subíase en altas torres", é.o); el otro, una versión de En busca del padre ("Caminí por altas mares", í.a)188.
Pertrechado de estos nuevos conocimientos sobre la tradición sefardí, Menéndez Pidal redactaría, por fin, en 1906 un "Catálogo del romancero judío-español", Cultura Española, IV (1906), 1045-1077, y V (1907), 161-199, que habría de servir de punto de partida y referencia para todas las encuestas y estudios sobre el Romancero judeo-español de Oriente, los Balcanes y Marruecos.
Diego Catalán: "El archivo del Romancero, patrimonio de la humanidad. Historia documentada de un siglo de historia" (2001)
NOTAS
177 Se trataba del trabajo de J. Benoliel, "Endecha de los judíos españoles de Tánger", RABM, IX, 1905, 128-133.
178 Es extraño, pero no los hallo inventariados en las listas de Madrid.
179 Según R. Menéndez Pidal recordará, tiempo después, en Cómo vivió y cómo vive el Romancero (s.a.); puede verse en la reed. de Estudios sobre el Romancero (1973), pp. 432-433. Don Manuel Manrique de Lara y Berry era entonces, profesionalmente, Capitán de Infantería de Marina y, según su hoja de servicios (que citaremos más adelante, cap. III), se hallaba en aquellos años en situación de "Excedente" en Madrid.
180 Según comunicó a Ramón en la carta que escribía acerca de ese día.
181 En RTLH, XI (1977-1978) se reproduce, en lámina entre las pp. 40 y 41, el original de dos transcripciones musicales de Manrique de Lara de romances grabados en los cilindros de cera del fonógrafo.
182 Puede hoy leerse editado en el Romancero tradicional extremeño, I (1995).
183 Los romances pueden verse editados en El romancero tradicional extremeño, I (1995). La contribución dialectológica de Izquierdo fue más rica que la romancística.
184 A continuación, le discutía que el romance de la "Muerte del rey de Salamanca, sea D. Juan D. Pedro o quien quiera" pudiera ser relativo a la Muerte del príncipe don Juan (1497), "insisto en que es conveniente no olvidar, lo que una vez le dije, que las judías de Marruecos parecen haber recibido este romance de tradición anterior a la expulsión".
185 Sólo conozco un fragmento de esta larga carta. En otra del 18 de Noviembre aún creía que el "Pidal" nombrado Director de la Academia podía ser Ramón Menéndez Pidal; en la carta que ahora cito se daba por enterado de que era "su Excmo. sr. tío" [Alejandro Pidal].
186 Las versiones remitidas por J. Benoliel fueron inventariadas en siete páginas por María Goyri y Ramón Menéndez Pidal. No se hizo este inventario atendiendo al orden de recepción de los textos. Sobre la contribución de J. Benoliel al Archivo del Romancero de Menéndez Pidal véase S. G. Armistead, El Romancero judeo-español (1978), I, pp. 15-18; III, pp. 78-82. Armistead reproduce en una lámina el comienzo del original de la única versión judeo-españo-la conocida de La enamorada de un muerto (que ya había sido publicado en El Romancero en la tradición oral moderna, 1972, lámina frente a la p. 26), romance que estudié en Por campos del Romancero, Madrid: Credos, 1970, cap. VII, pp. 189-227. En RTLH, III (1969), frente a la p. 152, puede verse otro original de Benoliel de un romance raro en Marruecos: Dirlos.
187 Este dato adicional figura en la siguiente carta.
188 La fecha de la carta de Abachary y la frase citada constan en un apunte de R. Menéndez Pidal y las versiones fueron añadidas a la lista citada en la n. 137 por el propio Menéndez Pidal. Esta carta ha sido reproducida por S. G. Armistead en las láminas de El Romancero judeo-español (1978). En otra carta, del 28-IX-190., le remitió varios textos religiosos ("Con la presente me permetto mandar a Vd. 3 cantigas que uzamos en Sabat, creo que le enteresarán a Vd.").
Imagen: fonógrafo de cilindros de cera.
SUMARIO:
I PRESENTACIÓN: EL ROMANCERO Y EL ARCHIVO MENÉNDEZ PIDAL
* EL ARCHIVO DEL ROMANCERO, PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD
II. CREACIÓN Y ORÍGENES DEL ARCHIVO MENÉNDEZ PIDAL DEL ROMANCERO
* 2. DESCUBRIMIENTO DE LA TRADICIÓN ORAL CASTELLANA EN 1900
* 3. LOS PRIMEROS PASOS EN LA COMPILACIÓN DE UN ROMANCERO ORAL PAN-HISPÁNICO
* 4. EN BUSCA DE ROMANCES FUERA DE LA PENÍNSULA: EN CANARIAS Y EN LAS COMUNIDADES SEFARDÍES, 1904
* 5. "A POR PAN Y A VER AL DUQUE": PRIMER VIAJE A AMÉRICA, 1905-1906
* 6. EL FONÓGRAFO DE CILINDROS DE CERA VIAJA EN BUSCA DE MELODÍAS, 1905-1906
* 7. LA MÚSICA Y LA DANZA COMO PARTE DEL ROMANCERO, 1905
* 8. ANTE UNA BUENA COSECHA, 1905-1908
* III EL ROMANCERO HISPÁNICO BAJO LOS AUSPICIOS DE LA JUNTA PARA AMPLIACIÓN DE ESTUDIOS
* 1. LA CREACIÓN DEL CENTRO DE ESTUDIOS HISTÓRICOS Y EL ROMANCERO DE RAMÓN MENÉNDEZ PIDAL
* 2. LOS DIALECTÓLOGOS Y EL ROMANCERO ORAL: 1910-1912
* 3. MANRIQUE DE LARA COLECTA EN ORIENTE EL ROMANCERO SEFARDÍ, 1911-1912
* 4. OTRAS APORTACIONES AL ARCHIVO ANTERIORES A LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL, 1909-1913
* 5. EL ROMANCERO HISPÁNICO DE AMÉRICA DEL NORTE, 1913
* 6. LOS PLIEGOS SUELTOS DE PRAGA LLEGAN AL ARCHIVO, 1913-1914
* 7. MENÉNDEZ PIDAL VUELVE A AMÉRICA, PERO DEJA DE LADO EL ROMANCERO, 1914
* 8. LAS GRANDES ENCUESTAS REGIONALES DE JOSEFINA SELA Y DE EDUARDO M. TORNER, 1914-1920
* 10. POESÍA POPULAR Y ROMANCERO, 1914-1918
* 11. LA GEOGRAFÍA FOLKLÓRICA Y LA EXPLORACIÓN DE REGIONES HASTA EL MOMENTO POCO ENCUESTADAS, 1920
* 12. AURELIO DE LLANO Y EL CONOCIMIENTO DEL ROMANCERO ASTURIANO, 1919-1925
* 13. OTRAS APORTACIONES AL ARCHIVO DE COMIENZOS DE LOS AÑOS 20
* 14. LA TERCERA PARTE DE LA SILVA, PERDIDA, 1921
* 15. EL ARCHIVO DEL ROMANCERO, EN EL OLIVAR DE CHAMARTÍN DE LA ROSA, 1925
* 16. SIGUE LA ACTIVIDAD RECOLECTORA, 1926-1927
* 17. LA CEGUERA TEMPORAL DE MENÉNDEZ PlDAL Y SU "FLOR NUEVA DE ROMANCES VIEJOS", 1926-1928
* IV. EL PROYECTO DE PUBLICACIÓN DE EPOPEYA Y ROMANCERO FINES DE LOS AÑOS 20, COMIENZOS DE LOS AÑOS 30
* 1. EL ROMANCERO, PARTE DE UNA MAGNA OBRA A PUNTO DE PUBLICARSE
* 2. LAS FUENTES DOCUMENTALES ANTIGUAS
* 3. GALICIA EN EL FOCO DE LAS INVESTIGACIONES SOBRE EL ROMANCERO PAN-HISPÁNICO, 1928-1931
* 4. APORTACIONES AL ARCHIVO DE COLECCIONES AJENAS. EL ROMANCERO CATALÁN, 1930-1933
* 5. 1930. LOS BAILES ROMANCEADOS QUE AÚN PERDURAN
* 7. PARÁLISIS RECOLECTORA EN PORTUGAL, 1930
* 8. DISCOGRAFÍA Y PELÍCULAS ETNOGRÁFICAS; EL ROMANCERO INCORPORADO A LA ENSEÑANZA ESCOLAR. 1932-1936
* V. LA GUERRA CIVIL. EL ROMANCERO, PARTE DEL TESORO NACIONAL
* 1. DISCONTINUIDAD DE EPOPEYA Y ROMANCERO Y CONTINUIDAD LATENTE DEL ROMANCERO
* 2. MADRID BOMBARDEADO. EL ARCHIVO "REFUGIADO" EN LA EMBAJADA DE MÉXICO
* 4. ANÍBAL OTERO, ENCUESTADOR DEL ROMANCERO Y DEL ATLAS LINGÜÍSTICO, ACUSADO DE ESPIONAJE
* 5. MENÉNDEZ PIDAL, ANCLADO EN CUBA, A LA BÚSQUEDA DE ROMANCES
* VI. EL ARCHIVO DEL ROMANCERO Y RAMÓN MENÉNDEZ PIDAL CONFINADOS EN SU CASA
* 1. DEPURACIÓN DE MENÉNDEZ PIDAL. FIN DE SUS PROYECTOS CON UNA PROYECCIÓN NACIONAL, 1939-1941
* 2. EL ROMANCERO DORMITA EN SUS CAJONES, 1939-1945
* 3. UNA NUEVA GENERACIÓN DE ROMANCISTAS TOMA EL RELEVO, 1945-1946
* 4. MENÉNDEZ PIDAL VUELVE AL ROMANCERO, 1946-1950
* 6. ÉXITO EN LA TRADICIÓN ORAL DE ALGUNAS VERSIONES FACTICIAS DE LA FLOR NUEVA
* 7. HACIA UNA RECUPERACIÓN DEL ROMANCERO PORTUGUÉS, 1948
* 12. HACIA UNA EDICIÓN INTEGRAL DE LAS FUENTES IMPRESAS DEL ROMANCERO DEL S. XVI
* VII. LA PUBLICACIÓN DE LOS FONDOS DEL ARCHIVO DEL ROMANCERO ENCOMENDADA AL SEMINARIO RAMÓN MENÉNDEZ PIDAL
* 1. EL "SEMINARIO MENÉNDEZ PIDAL" DE LA UNIVERSIDAD DE MADRID Y EL ARCHIVO MENÉNDEZ PIDAL, 1954
* 2. LOS PRIMEROS DIFÍCILES AÑOS DEL "SEMINARIO MENÉNDEZ PIDAL" Y EL ROMANCERO, 1954-1959
* 3. INTENTOS DE ROMPER CON EL AISLAMIENTO INTELECTUAL DE LA ESPAÑA DE LOS AÑOS 50
* 4. GRAN RECOLECCIÓN DE ROMANCES EN LAS ISLAS CANARIAS, 1952-1957
* 5. EL ROMANCERO TRADICIONAL, CUESTIONADO, 1959-1962
* 6. ÚLTIMAS CONTRIBUCIONES DE MENÉNDEZ PlDAL AL ROMANCERO, 1959-1965
* 7. MENÉNDEZ PIDAL EN ISRAEL Y EL ROMANCERO SEFARDÍ, 1964
* 8. EL SEMINARIO MENÉNDEZ PIDAL Y EL FUTURO DEL ARCHIVO-BIBLIOTECA MENÉNDEZ PIDAL, 1963-1966
* 9. REACTIVACIÓN DE LA LABOR EDITORIAL DEL ROMANCERO, 1966
* VIII EL ARCHIVO DEL ROMANCERO RENACE COMO PATRIMONIO CULTURAL DE INTERÉS MUNDIAL
* 2. BELLAS PALABRAS Y NEGRAS REALIDADES, 1969-1970
* 4. EL ARCHIVO DEL ROMANCERO Y LA CONEXIÓN AMERICANA, NUEVAS PERSPECTIVAS, 1971-1975
* 5. EL ROMANCERO ¿AÚN VIVE?, 1973-1975
* 6. CRECER, PARA NO MORIR, 1976-1981
* 7. EL ROMANCERO AÚN VIVE. VOCES NUEVAS DE LA TRADICIÓN ORAL, 1977-1978
* 8. DESCRIPCIÓN Y ANÁLISIS DEL ROMANCERO. UNA NUEVA EMPRESA COLECTIVA, 1977-1984
* 9. LAS GRANDES ENCUESTAS COLECTIVAS DEL PROYECTO DEAPHR, 1980-1984
* 10. LAS TRADICIONES ORALES LEONESAS Y EL ROMANCERO EN LEÓN A FINALES DEL S. XX, 1984-1988
* 13. EL ROMANCERO ANTE EL CENTENARIO DEL ’98
* EPÍLOGO
* 1.- EL CENTRO DE ESTUDIOS HISTÓRICOS MENÉNDEZ PIDAL DINAMITADO
* 3.- LOS FONDOS DEL ARCHIVO DEL ROMANCERO Y LA INVESTIGACIÓN
Diseño gráfico:
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